La tragedia ocurrida en Puerto Principe en Haiti, hace estremecer al mundo en general y no encontrar explicación alguna de porque pasan estas cosas en estos lugares de extrema pobreza y preguntarse si Dios verdaderamente existe, y si es así, porque permite esto contra estas gentes que viven sin recursos o con los justos para poder sobrevivir. Es escalofriante contemplar las imagenes de los medios de comunicación y fotografias que nos llegan de allir y volverse a preguntar si se podía en parte poder evitado, maxime cuando actualmente se dispone de tecnologia necesaria para avisar con la antelación de seismos y tsunamis, y que ya disponen paises como Japón. Esa tecnologia que deberian de implantarse en estos paises financiados por la ONU u otros organismos en estos lugares muy propicios y que harian salvar miles y miles de vidas y ahorraria movimiento de ayudas humanitarias. Y es que siempre pasa igual, se hace mas incapie en curar la herida y no pensar poder evitarla, mientras tanto la vida sigue en este mundo de contrastes, del dolor de la miseria y el ego por el afán de la riqueza...........
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